Encontrados 105 resultados para: vestiduras

  • Al oír las palabras de aquella mujer, el rey rasgó sus vestiduras; y como pasaba sobre el muro, la gente vio el cilicio que llevaba sobre su carne. (II Reyes 6, 30)

  • Jehú dijo al encargado del vestuario: "Saquen las vestiduras para todos los fieles de Baal". Él sacó las vestiduras. (II Reyes 10, 22)

  • Y al ver al rey de pie sobre el estrado, como era costumbre, a los jefes y las trompetas junto al rey, y a todo el pueblo del país que estaba de fiesta y tocaba las trompetas, rasgó sus vestiduras y gritó: "¡Traición!". (II Reyes 11, 14)

  • Eliaquím, hijo de Jilquías, el mayordomo de palacio, Sebná, el secretario, y Joaj, hijo de Asaf, el archivista, se presentaron ante Ezequías con sus vestiduras desgarradas, y le informaron de las palabras del copero mayor. (II Reyes 18, 37)

  • Cuando el rey Ezequías oyó esto, rasgó sus vestiduras, se cubrió con un sayal y fue a la Casa del Señor. (II Reyes 19, 1)

  • Cuando el rey oyó las palabras del libro de la Ley, rasgó sus vestiduras, (II Reyes 22, 11)

  • Porque tu corazón se ha conmovido y te has humillado delante del Señor al oír lo que dije contra este lugar y contra sus habitantes, a saber, que se convertirán en una devastación y en una maldición; porque has rasgado tus vestiduras y has llorado delante de mí, también yo he escuchado -oráculo del Señor-. (II Reyes 22, 19)

  • El rey de Israel y Josafat, rey de Judá, estaban sentados cada uno en su trono, con sus vestiduras reales, sobre la explanada que está a la entrada de la puerta de Samaría, mientras todos los profetas vaticinaban delante de ellos. (II Crónicas 18, 9)

  • Y el rey de Israel dijo a Josafat: "Yo me voy a disfrazar para entrar en batalla, pero tú quédate con tus vestiduras". El rey de Israel se disfrazó, y entraron en combate. (II Crónicas 18, 29)

  • Y al ver al rey de pie sobre el estrado, junto a la entrada, a los jefes y las trompetas junto al rey, a todo el pueblo que estaba de fiesta y tocaba las trompetas, y a los cantores que dirigían las aclamaciones con sus instrumentos musicales, rasgó sus vestiduras y gritó: "¡Traición! ¡Traición!". (II Crónicas 23, 13)

  • Cuando el rey oyó las palabras de la Ley, rasgó sus vestiduras, (II Crónicas 34, 19)

  • Porque tu corazón se ha conmovido y te has humillado delante de Dios al oír sus palabras contra este lugar y contra sus habitantes; porque te has humillado delante de mí, has rasgado tus vestiduras y has llorado en mi presencia, también yo he escuchado -oráculo del Señor- . (II Crónicas 34, 27)


“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina