Encontrados 60 resultados para: motivo

  • Como se escapa el pájaro y vuela la golondrina, así no se realiza la maldición sin motivo. (Proverbios 26, 2)

  • Una justa sanción les alcanzará, sin embargo, por doble motivo: por formarse de Dios una idea falsa al darse a los ídolos y por jurar injustamente contra la verdad con desprecio de toda santidad. (Sabiduría 14, 30)

  • ¿Quién sufrió esta prueba y fue hallado perfecto? será para él motivo de gloria. ¿Quién pudo prevaricar y no prevaricó, hacer mal y no lo hizo? (Eclesiástico 31, 10)

  • Sí, así dice el Señor Yahveh: A Egipto bajó mi pueblo en un principio, a ser forastero allí, y luego Asiria le oprimió sin motivo. (Isaías 52, 4)

  • Y ahora, ¿qué voy a hacer aquí - oráculo de Yahveh - pues mi pueblo ha sido arrebatado sin motivo? Sus dominadores profieren gritos - oráculo de Yahveh - y todo a lo largo del día mi nombre es blasfemado. (Isaías 52, 5)

  • Porque motivo de mi furor y de mi ira ha sido para mí esta ciudad, desde el día en que la edificaron hasta hoy, que es como para quitármela de delante, (Jeremías 32, 31)

  • Sade. Cazar me cazaron como a un pájaro, mis enemigos sin motivo. (Lamentaciones 3, 52)

  • Ellos os consolarán cuando veáis su conducta y sus obras, y sabréis que no sin motivo hice yo todo lo que hice en ella, oráculo del Señor Yahveh. (Ezequiel 14, 23)

  • Con tal motivo, en cuanto se oyó sonar el cuerno, el pífano, la cítara, la sambuca, el salterio, la zampoña y toda clase de música, todos los pueblos, naciones y lenguas se postraron y adoraron la estatua de oro que había erigido el rey Nabucodonosor. (Daniel 3, 7)

  • Por ello los ministros y los sátrapas se pusieron a buscar un motivo de acusación contra Daniel en algún asunto de Estado; pero no pudieron encontrar ningún motivo de acusación ni falta alguna, porque él era fiel y no se le podía reprochar de negligencia ni falta. (Daniel 6, 5)

  • Entonces se dijeron aquellos hombres: «No encontraremos ningún motivo de acusación contra este Daniel si no es en materia de la ley de su Dios.» (Daniel 6, 6)

  • Pero ambos volvieron sobre sus pasos y se encontraron de nuevo en el mismo sitio. Preguntándose entonces mutuamente el motivo, se confesaron su pasión y acordaron buscar el momento en que pudieran sorprender a Susana a solas. (Daniel 13, 14)


“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina