Encontrados 431 resultados para: comida en el desierto

  • y dijeron a Moisés: "¿Es que no había sepulcros en Egipto, que nos has traído al desierto a morir? ¿Qué nos has hecho con sacarnos de Egipto? (Exodo 14, 11)

  • ¿No te decíamos en Egipto: No te preocupes de nosotros, pues queremos servir a los egipcios? Porque ¿no es, acaso, mejor servir a los egipcios que morir en el desierto?". (Exodo 14, 12)

  • Moisés hizo partir a los israelitas del mar Rojo. Avanzaron hacia el desierto de Sur y caminaron tres días sin encontrar agua. (Exodo 15, 22)

  • La comunidad de Israel partió de Elín y llegaron al desierto de Sin, entre Elín y Sinaí, el día quince del segundo mes después de la salida de Egipto. (Exodo 16, 1)

  • Toda la comunidad de Israel murmuró contra Moisés y Aarón en el desierto (Exodo 16, 2)

  • diciendo: "¡Ojalá hubiéramos muerto por mano del Señor en Egipto, cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne y comíamos pan hasta saciarnos! Vosotros, en cambio, nos habéis traído a este desierto para hacer morir de hambre a toda esta muchedumbre". (Exodo 16, 3)

  • Mientras Aarón estaba hablando, miraron hacia el desierto, y vieron aparecer la gloria del Señor en la nube. (Exodo 16, 10)

  • Cuando se evaporó el rocío, apareció sobre la superficie del desierto una cosa menuda, granulada, fina, como escarcha sobre la tierra. (Exodo 16, 14)

  • Moisés dijo: "Esto es lo que manda el Señor: Tomad dos litros y conservadlo para que vuestros descendientes vean el pan con que os he alimentado en el desierto, cuando os saqué de Egipto". (Exodo 16, 32)

  • La comunidad de los israelitas partió del desierto de Sin por etapas, según les ordenaba el Señor, y acamparon en Rafidín, donde el pueblo no encontró agua para beber. (Exodo 17, 1)

  • Jetró, suegro de Moisés, con los hijos y la mujer de éste, se llegó hasta el desierto, donde estaba acampado, al monte de Dios, (Exodo 18, 5)

  • A los tres meses de la salida de Egipto, los israelitas llegaron al desierto de Sinaí. (Exodo 19, 1)


“É sempre necessário ir para a frente, nunca para trás, na vida espiritual. O barco que pára em vez de ir adiante é empurrado para trás pelo vento.” São Padre Pio de Pietrelcina