Encontrados 472 resultados para: fiesta de los judíos

  • Los israelitas que se encontraban en Jerusalén celebraron la fiesta de los panes sin levadura durante siete días con gran alegría, mientras los levitas y los sacerdotes cantaban con toda fuerza las alabanzas del Señor día tras día. (II Crónicas 30, 21)

  • Ezequías tuvo palabras de elogio para todos los levitas que se habían distinguido en el servicio del Señor. Celebraron la fiesta durante siete días, inmolando las víctimas de los sacrificios de reconciliación y cantando las alabanzas del Señor, Dios de sus padres. (II Crónicas 30, 22)

  • Pero toda la asamblea decidió alargar la fiesta siete días más, y así se hizo con gran alegría, (II Crónicas 30, 23)

  • Hubo una gran fiesta en Jerusalén, como no se había visto desde los días de Salomón, hijo de David, rey de Israel. (II Crónicas 30, 26)

  • Los israelitas que se encontraban presentes celebraron la pascua, y durante siete días la fiesta de los panes sin levadura. (II Crónicas 35, 17)

  • Celebraron también la fiesta de los tabernáculos, según está prescrito, ofreciendo cada día el número de holocaustos ritualmente establecidos. (Esdras 3, 4)

  • Sepa el rey que los judíos que vinieron y se establecieron en Jerusalén están reconstruyendo esta ciudad rebelde y malvada; quieren levantar las murallas y ya han echado los cimientos. (Esdras 4, 12)

  • Tan pronto como leyeron la carta del rey Artajerjes, el gobernador Rejún, el secretario Simsay y sus colegas fueron inmediatamente a Jerusalén y obligaron por la fuerza a los judíos a parar las obras. (Esdras 4, 23)

  • Los profetas Ageo y Zacarías, hijo de Idó, comenzaron a profetizar a los judíos residentes en Jerusalén y Judá en el nombre del Dios de Israel, y a su impulso (Esdras 5, 1)

  • Pero los ojos de su Dios velaban sobre los dirigentes judíos, y no les obligaron a parar la obra hasta que se mandara un informe a Darío y se recibiera su respuesta. (Esdras 5, 5)

  • dejad continuar las obras de ese templo de Dios al gobernador de Judá y a los dirigentes judíos, que deben reconstruir este templo de Dios en su mismo sitio. (Esdras 6, 7)

  • Éstas son mis órdenes acerca de lo que debéis hacer con esos dirigentes judíos para la reconstrucción del templo de Dios: de los ingresos reales procedentes de los tributos de Transeufratina ha de proveerse puntualmente a esos hombres el dinero necesario para que no se interrumpan las obras. (Esdras 6, 8)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina