27. Cuando Abner estuvo de vuelta en Hebrón, Joab lo llevó aparte a un lado de la entrada, como para hablar con él en privado, y allí lo hirió mortalmente en el bajo vientre, a causa de la sangre de su hermano Asael.





“Nunca se canse de rezar e de ensinar a rezar.” São Padre Pio de Pietrelcina