Exodo, 22
1. Si el ladrón, sorprendido al perforar la pared, es herido mortalmente, no habrá venganza de sangre.
1. Si el ladrón, sorprendido al perforar la pared, es herido mortalmente, no habrá venganza de sangre.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina