35. Entre tanto una palabra de Yavé llegó a uno de los hermanos profetas, que dijo a su compañero: «Hiéreme.» Pero el hombre no quiso herirlo.





“Os corações fortes e generosos não se lamentam, a não ser por grandes motivos e,ainda assim,não permitem que tais motivos penetrem fundo no seu íntimo.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina