5. Con gran ánimo reparó la parte de la muralla que estaba derribada, alzando torres sobre ella. Levantó, además, otra muralla exterior, fortificó el Milo en la ciudad de David y fabricó gran cantidad de armas y escudos.





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina