Salmos, 137
3. Allí los que nos habían deportado nos pedían palabras de una canción y nuestros raptores, un canto de alegría: "¡Cántennos un canto de Sión!"
3. Allí los que nos habían deportado nos pedían palabras de una canción y nuestros raptores, un canto de alegría: "¡Cántennos un canto de Sión!"
“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina