Fundar 98 Resultados para: malos

  • Raza de víboras, ¿cómo podéis vosotros hablar cosas buenas siendo malos? Porque de lo que rebosa el corazón habla la boca. (Mateo 12, 34)

  • y cuando está llena, la sacan a la orilla, se sientan, y recogen en cestos los buenos y tiran los malos. (Mateo 13, 48)

  • Así sucederá al fin del mundo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de entre los justos (Mateo 13, 49)

  • Los siervos salieron a los caminos, reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos, y la sala de bodas se llenó de comensales. (Mateo 22, 10)

  • En aquel momento curó a muchos de sus enfermedades y dolencias, y de malos espíritus, y dio vista a muchos ciegos. (Lucas 7, 21)

  • Si, pues, vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan!» (Lucas 11, 13)

  • de forma que bastaba aplicar a los enfermos los pañuelos o mandiles que había usado y se alejaban de ellos las enfermedades y salían los espíritus malos. (Hechos 19, 12)

  • Algunos exorcistas judíos ambulantes intentaron también invocar el nombre del Señor Jesús sobre los que tenían espíritus malos, y decían: «Os conjuro por Jesús a quien predica Pablo.» (Hechos 19, 13)

  • entre ellos vivíamos también todos nosotros en otro tiempo en medio de las concupiscencias de nuestra carne, siguiendo las apetencias de la carne y de los malos pensamientos, destinados por naturaleza, como los demás, a la Cólera... (Efesios 2, 3)

  • aprovechando bien el tiempo presente, porque los días son malos. (Efesios 5, 16)

  • Atención a los perros; atención a los obreros malos; atención a los falsos circuncisos. (Filipenses 3, 2)

  • Por tanto, mortificad vuestros miembros terrenos: fornicación, impureza, pasiones, malos deseos y la codicia, que es una idolatría, (Colosenses 3, 5)


“Mesmo quando perdemos a consciência deste mundo, quando parecemos já mortos, Deus nos dá ainda uma chance de entender o que é realmente o pecado, antes de nos julgar. E se entendemos corretamente, como podemos não nos arrepender?” São Padre Pio de Pietrelcina