Fundar 213 Resultados para: Cuerpo

  • Hizo el candelabro de oro puro forjado; su base, fuste, copas, cálices y pétalos hacían un solo cuerpo. (Exodo 37, 17)

  • Los cálices y los brazos hacían un solo cuerpo con el candelabro, y todo el conjunto era de oro puro forjado. (Exodo 37, 22)

  • Hizo el altar de los perfumes de madera de acacia, de medio metro de largo por medio de ancho, o sea, cuadrado, y un metro de alto. Sus cuernos formaban un solo cuerpo en el altar. (Exodo 37, 25)

  • Le puso cuernos a sus cuatro lados, formando un solo cuerpo, y lo recubrió de bronce. (Exodo 38, 2)

  • Sin embargo, las fuentes, las cisternas y los embalses de agua permanecerán puros; pero el que toque el cuerpo muerto será impuro. (Levítico 11, 36)

  • éste examinará al enfermo, y si ve que la lepra cubre todo su cuerpo, lo declarará puro, pues, una vez que se ha vuelto todo blanco, es puro. (Levítico 13, 13)

  • El día séptimo se cortará de nuevo pelos, cabello, barba y cejas; se cortará todos los pelos. Lavará sus vestidos, bañará con agua su cuerpo y será puro. (Levítico 14, 9)

  • Cuando el paciente esté curado de su derrame, contará siete días para su purificación; lavará sus vestidos, bañará su cuerpo en agua corriente y será puro. (Levítico 15, 13)

  • Cuando un hombre haya tenido un derrame de semen, lavará con agua todo su cuerpo y será impuro hasta la tarde. (Levítico 15, 16)

  • se lavará el cuerpo con agua en lugar sagrado, se revestirá de nuevo y saldrá para ofrecer su holocausto y el del pueblo, para hacer el rito de absolución por sí mismo y por el pueblo, (Levítico 16, 24)

  • No se raparán la cabeza, no rasurarán los bordes de su barba ni se harán cortes en su cuerpo. (Levítico 21, 5)

  • el que haya tenido alguno de estos contactos, será impuro hasta la tarde; no podrá comer de las cosas santas si primero no ha lavado su cuerpo con agua. (Levítico 22, 6)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina