22. Si unos hombres se pelean y golpean a una mujer encinta haciéndola abortar, pero sin ningún daño especial, el que la ha golpeado será multado con la cantidad que el marido de la mujer pida y decidan los jueces.





“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina