Amós, 5
23. Váyanse lejos con el barullo de sus cantos, que ya no quiero escuchar la música de sus arpas.
23. Váyanse lejos con el barullo de sus cantos, que ya no quiero escuchar la música de sus arpas.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina