Löydetty 106 Tulokset: órdenes

  • De los hijos de Isacar, expertos en distinguir las oportunidades y saber lo que Israel debía hacer, doscientos jefes, y todos sus hermanos bajo sus órdenes. (1 Crónicas 12, 33)

  • Ahí tienes las clases de los sacerdotes y de los levitas para todo el servicio de la Casa de Yavé; estarán a tu lado, para cada tipo de obra, todos los hombres de buena voluntad y hábiles para cualquier clase de servicio; también los jefes y el pueblo entero están a tus órdenes.» (1 Crónicas 28, 21)

  • Debajo del borde había en todo el contorno unas como figuras de granadas, diez por cada lado, colocadas en dos órdenes, fundidas en una sola masa. (2 Crónicas 4, 3)

  • Para la tribu de Benjamín: Eliada, valiente guerrero, tenía a sus órdenes doscientos mil hombres armados con arco y escudo. (2 Crónicas 17, 17)

  • Joyadá puso centinelas en la Casa de Yavé, a las órdenes de los sacerdotes y levitas que David había repartido en la Casa de Yavé, conforme a lo escrito en la Ley de Moisés, para ofrecer los sacrificios con alegría y cánticos, según los reglamentos de David. (2 Crónicas 23, 18)

  • Ozías tenía un ejército que hacía la guerra; eran tropas que salían a campaña por grupos, conforme al número de su censo hecho bajo la vigilancia de Jejiel, el escriba, y Maseías, el notario, a las órdenes de Janaías, uno de los jefes del rey. (2 Crónicas 26, 11)

  • A sus órdenes estaba un ejército de trescientos siete mil quinientos hombres que hacían la guerra con gran valor, para ayudar al rey contra el enemigo. (2 Crónicas 26, 13)

  • Jejiel, Azarías, Najot, Azael, Jerimot, Josabat, Eliel, Kimakías, Majot y Benaías eran inspectores, a las órdenes de Konanías y de Simí, su hermano, bajo la vigilancia del rey Ezequías y de Ozarías, príncipe de la Casa de Dios. (2 Crónicas 31, 13)

  • En las ciudades sacerdotales estaban permanentemente bajo sus órdenes Edem, Mibyamín, Jesua, Semaías, Amarías y Sekanías para repartir a sus hermanos, así grandes como chicos, según sus clases, (2 Crónicas 31, 15)

  • «Artajerjes, rey de reyes, a Esdras, sacerdote y maestro, instruido en la Ley del Dios de los Cielos, paz: He dado órdenes para que (Esdras 7, 12)

  • Les di órdenes respecto a Idó, el jefe que permanecía en Casifía, les di el recado que debían transmitir a Idó y a sus hermanos los ayudantes que vivían en Casifía, para que nos mandaran servidores para la Casa de nuestro Dios. (Esdras 8, 17)

  • Les pediste con mucha insistencia que volvieran a tu Ley, pero ellos, muy orgullosos, no escucharon tus mandatos y órdenes. No observaron lo que el hombre debe cumplir para tener la vida, te volvieron la espalda y por su dura cabeza no te escucharon. (Nehemías 9, 29)


“Pode-se manter a paz de espírito mesmo no meio das tempestades da vida”. São Padre Pio de Pietrelcina