Löydetty 524 Tulokset: Bel

  • Así fue como Noemí, acompañada de Rut, su nuera moabita, regresó de Moab. Y justo cuando llegaron a Belén estaba comenzando la cosecha de la cebada. (Rut 1, 22)

  • Como ella se lo diera, Rut salió al campo y se puso a espigar detrás de los segadores. Dio la coincidencia de que el campo adonde ella había llegado pertenecía a Booz, pariente de Elimelec, que precisamente llegó ese día de Belén. (Rut 2, 3)

  • Todos los que se encontraban allí dijeron: «En efecto, nosotros somos testigos.» Los ancianos, por su parte, agregaron: «¡Que Yavé te conceda que tu mujer sea como Raquel y Lía, las dos que dieron origen a la familia de Israel! ¡Que seas poderoso en Efrata y famoso en Belén! (Rut 4, 11)

  • Tenía un hijo llamado Saúl, joven y de bella presencia, además de que sobrepasaba a todo el mundo en estatura. (1 Samuel 9, 2)

  • Aquí tienen a su rey. Ya ven cómo el Señor les ha dado el rey que ustedes escogieron y pidieron. ¡Ojalá teman a Yavé, lo sirvan y escuchen su voz, y no se rebelen contra sus órdenes! (1 Samuel 12, 13)

  • Porque si no escuchan su voz y se rebelan contra sus órdenes, entonces la mano de Yavé pesará sobre ustedes y sobre su rey. (1 Samuel 12, 15)

  • Pero el pueblo dijo a Saúl: «¿Acaso va a morir Jonatán, que acaba de dar a Israel esta gran victoria? ¡Ni siquiera pensarlo! Por la vida de Yavé, no caerá en tierra ni un cabello de su cabeza, porque con ayuda de Dios lo hizo.» Así el pueblo liberó a Jonatán de la muerte. (1 Samuel 14, 45)

  • la rebeldía es tan grave como el pecado de los adivinos; tener el corazón porfiado es como guardar ídolos. Puesto que tú has descartado la orden de Yavé, él te ha descartado como rey.» (1 Samuel 15, 23)

  • Yavé dijo a Samuel: «Yo soy el que ha rechazado a Saúl y he decidido que no reinará más sobre Israel. ¿Hasta cuándo, pues, vas a estar llorando por él? Llena tu cuerno de aceite, pues quiero que vayas a casa de Jesé, del pueblo de Belén, porque he elegido a uno de sus hijos para ser mi rey.» (1 Samuel 16, 1)

  • Cumplió Samuel lo que Yavé le había mandado. Cuando llegó a Belén, los jefes de la ciudad salieron temblando a su encuentro y le preguntaron: «¿Vienes en son de paz?» (1 Samuel 16, 4)

  • Y un servidor, tomando la palabra, dijo: «Hace poco vi a un hijo de Jesé el belenita que sabe tocar, es valiente y hábil para la guerra, agradable para conversar, de buena presencia y muy favorecido de Yavé.» (1 Samuel 16, 18)

  • David era hijo de un efrateo de Belén de Judá, llamado Jesé, que tenía ocho hijos. (1 Samuel 17, 12)


“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina