Löydetty 235 Tulokset: sed
Ustedes también aparentan como que fueran personas muy correctas, pero en su interior están llenos de falsedad y de maldad. (Evangelio según San Mateo 23, 28)
Porque tuve hambre y ustedes me dieron de comer; tuve sed y ustedes me dieron de beber. Fui forastero y ustedes me recibieron en su casa. (Evangelio según San Mateo 25, 35)
Entonces los justos dirán: «Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te dimos de comer, o sediento y te dimos de beber? (Evangelio según San Mateo 25, 37)
Porque tuve hambre y ustedes no me dieron de comer; tuve sed y no me dieron de beber; (Evangelio según San Mateo 25, 42)
Estos preguntarán también: «Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento, desnudo o forastero, enfermo o encarcelado, y no te ayudamos?» (Evangelio según San Mateo 25, 44)
Jesús le dijo: «El que beba de esta agua volverá a tener sed, (Evangelio según San Juan 4, 13)
pero el que beba del agua que yo le daré nunca volverá a tener sed. El agua que yo le daré se convertirá en él en un chorro que salta hasta la vida eterna.» (Evangelio según San Juan 4, 14)
La mujer le dijo: «Señor, dame de esa agua, y así ya no sufriré la sed ni tendré que volver aquí a sacar agua.» (Evangelio según San Juan 4, 15)
Jesús les dijo: «Yo soy el pan de vida. El que viene a mí nunca tendrá hambre y el que cree en mí nunca tendrá sed. (Evangelio según San Juan 6, 35)
El último día de la fiesta, que era el más solemne, Jesús, puesto en pie, exclamó con voz potente: «El que tenga sed, que venga a mí, y que beba (Evangelio según San Juan 7, 37)
¿Quién de ustedes encontrará falsedad en mí? Y si les digo la verdad, ¿por qué no me creen? (Evangelio según San Juan 8, 46)
Al oír Pilato estas palabras, hizo salir a Jesús al lugar llamado el Enlosado, en hebreo Gábbata, y lo hizo sentar en la sede del tribunal. (Evangelio según San Juan 19, 13)