Löydetty 679 Tulokset: Israelitas

  • Nunca se había celebrado en Israel una Pascua como esta desde los días del profeta Samuel; ninguno de los reyes de Israel había celebrado una Pascua como la que celebró Josías con los sacerdotes y los levitas, con todo Judá, con los israelitas allí presentes y con los habitantes de Jerusalén. (II Crónicas 35, 18)

  • Los sacerdotes, los levitas y una parte del pueblo se establecieron en Jerusalén; los cantores, los porteros, los empleados del Templo y todos los otros israelitas se instalaron en sus respectivas ciudades. (Esdras 2, 70)

  • Cuando llegó el séptimo mes, los israelitas ya estaban en sus respectivas ciudades y todo el pueblo se congregó en Jerusalén como un solo hombre. (Esdras 3, 1)

  • Zorobabel, Josué y los demás jefes de familia israelitas les respondieron: "No podemos edificar junto con ustedes una Casa para nuestro Dios: la edificaremos nosotros solos para el Señor, el Dios de Israel, como lo ordenó Ciro, rey de Persia". (Esdras 4, 3)

  • Todos los israelitas -los sacerdotes, los levitas, y el resto de los repatriados- celebraron alegremente la Dedicación de esta Casa de Dios. (Esdras 6, 16)

  • Comieron la víctima pascual los israelitas que habían vuelto del destierro y todos los que habían renunciado a la impureza de la gente del país y se habían unido a ellos para buscar al Señor, el Dios de Israel. (Esdras 6, 21)

  • El séptimo año del reinado de Artajerjes, subieron a Jerusalén un buen número de israelitas, de sacerdotes, de levitas, de cantores, de porteros y de empleados del Templo. (Esdras 7, 7)

  • y pesé delante de ellos la plata, el oro y los utensilios, que el rey, sus consejeros y sus funcionarios y todos los israelitas residentes allí, habían ofrecido para la Casa de nuestro Dios. (Esdras 8, 25)

  • Mientras Esdras, bañado en llanto y postrado delante de la Casa de Dios, oraba y hacía esta confesión, una gran cantidad de israelitas -hombres, mujeres y niños- se congregaron a su alrededor, derramando abundantes lágrimas. (Esdras 10, 1)

  • Entre los israelitas: de los hijos de Parós: Ramías, Izías, Malquías, Miamím, Eleazar, Malquías y Benaías; (Esdras 10, 25)

  • Que tus oídos estén atentos y tus ojos abiertos, para escuchar la plegaria de tu servidor, la que ahora yo te dirijo día y noche por los israelitas, tus servidores, confesando sus pecados, porque hemos pecado contra ti. ¡Sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado! (Nehemías 1, 6)

  • Pero cuando Sambalat, el joronita, y Tobías, el esclavo amonita, se enteraron de mi llegada, se disgustaron mucho de que alguien viniera a prestar ayuda a los israelitas. (Nehemías 2, 10)


“Reze pelos infiéis, pelos fervorosos, pelo Papa e por todas as necessidades espirituais e temporais da Santa Igreja, nossa terna mãe. E faça uma oração especial por todos os que trabalham para a salvação das almas e para a glória do nosso Pai celeste.” São Padre Pio de Pietrelcina