Löydetty 127 Tulokset: señal de Gedeón
El altar se resquebrajó y se desparramó la ceniza grasienta que había en él, conforme a la señal que había dado el hombre de Dios por orden del Señor. (I Reyes 13, 5)
Y esto te servirá de señal: Este año se comerá del grano caído, y el año próximo, de lo que brote espontáneamente; pero al tercer año, siembren y cosechen, planten viñas y coman de sus frutos. (II Reyes 19, 29)
Entonces Ezequías dijo a Isaías: "¿Cuál es la señal de que el Señor me sanará y que dentro de tres días podré subir a la Casa del Señor?". (II Reyes 20, 8)
Isaías respondió: "Esta es la señal que te da el Señor para confirmar la palabra que ha pronunciado: ¿La sombra debe avanzar diez grados o retroceder diez grados?". (II Reyes 20, 9)
En aquel tiempo, Ezequías cayó gravemente enfermo y estuvo a punto de morir. Entonces imploró al Señor; el Señor le respondió y le concedió una señal extraordinaria. (II Crónicas 32, 24)
Sin embargo, durante las conversaciones con los príncipes de Babilonia, enviados para informarse sobre la señal extraordinaria ocurrida en el país, Dios lo abandonó para ponerlo a prueba y conocer sus sentimientos. (II Crónicas 32, 31)
Pero ¿cómo podré recuperar ese dinero que tiene Gabael? Él no me conoce a mí ni yo a él. ¿Qué señal le daré para que me reconozca, me crea y me entregue el dinero? Además, no sé qué camino hay que tomar para ir a Media". (Tobías 5, 2)
En aquellos días llegó todo esto a oídos de Judit, hija de Merarí, hijo de Ox, hijo de José, hijo de Oziel, hijo de Helcías, hijo de Ananías, hijo de Gedeón, hijo de Rafaín, hijo de Ajitob, hijo de Elías, hijo de Jilquías, hijo de Eliab, hijo de Natanael, hijo de Salamiel, hijo de Sarasadai, hijo de Israel. (Judit 8, 1)
Por eso lavo mis manos en señal de inocencia y doy vueltas alrededor de tu altar, (Salmos 26, 6)
Diste a tus fieles la señal de retirada, para que huyeran de los arqueros. Pausa (Salmos 60, 6)
Entonces, ¿en vano mantuve puro mi corazón y lavé mis manos en señal de inocencia? (Salmos 73, 13)
y cayeron con el rostro en tierra. Luego, a una señal dada por las trompetas, alzaron sus gritos al cielo. (I Macabeos 4, 40)