Löydetty 1288 Tulokset: Ner

  • Tomarás después el carnero de la investidura y cocerás su carne en lugar sagrado; (Exodo 29, 31)

  • Aarón y sus hijos comerán a la entrada de la Tienda del Encuentro la carne del carnero y el pan del canastillo. (Exodo 29, 32)

  • Harás, pues, con Aarón y con sus hijos de esta manera, según todo lo que te he mandado. Siete días invertirás en la investidura. (Exodo 29, 35)

  • en holocausto perpetuo, de generación en generación, ante Yahveh, a la entrada de la Tienda del Encuentro, donde me encontraré contigo, para hablarte allí. (Exodo 29, 42)

  • y lo quemará también cuando al atardecer alimente las lámparas. Será incienso continuo ante Yahveh, de generación en generación. (Exodo 30, 8)

  • Aarón una vez al año hará expiación sobre los cuernos de este altar. Con la sangre del sacrificio por el pecado, es decir, el de la expiación, una vez cada año hará expiación por él en vuestras sucesivas generaciones. Cosa sacratísima es el altar en honor de Yahveh. (Exodo 30, 10)

  • Tomarás el dinero del rescate de parte de los israelitas, y lo darás para el servicio de la Tienda del Encuenro; y será para los israelitas como recordatorio ante Yahveh por el rescate de sus vidas. (Exodo 30, 16)

  • Se lavarán las manos y los pies, y no morirán. Este será decreto perpetuo para ellos, para Aarón y su posteridad, de generación en generación. (Exodo 30, 21)

  • Hablarás a los israelitas, diciendo: Este será para vosotros el óleo de la unción sagrada de generación en generación. (Exodo 30, 31)

  • Habla tú a los israelitas y diles: No dejéis de guardar mis sábados; porque el sábado es una señal entre yo y vosotros, de generación en generación, para que sepáis que yo, Yahveh, soy el que os santifico. (Exodo 31, 13)

  • Los israelitas guardarán el sábado celebrándolo de generación en generación como alianza perpetua. (Exodo 31, 16)

  • Al día siguiente dijo Moisés al pueblo: «Habéis cometido un gran pecado. Yo voy a subir ahora donde Yahveh; acaso pueda obtener la expiación de vuestro pecado.» (Exodo 32, 30)


“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina