Löydetty 567 Tulokset: sombra de la muerte

  • Él reconstruyó Elat y la devolvió a Judá, después de la muerte de su padre. (II Reyes 14, 22)

  • El Señor castigó al rey, que estuvo leproso hasta su muerte; vivió en una casa aislada, mientras su hijo Jotán estaba al frente del palacio del gobierno de la nación. (II Reyes 15, 5)

  • Isaías respondió: "Ésta es la señal de que el Señor cumplirá la palabra que ha dado: ¿Quieres que la sombra adelante diez grados o que retroceda diez grados?". (II Reyes 20, 9)

  • Ezequías replicó: "Fácil es a la sombra adelantar diez grados. No; que la sombra vuelva atrás diez grados". (II Reyes 20, 10)

  • Entonces el profeta Isaías invocó al Señor, el cual hizo retroceder a la sombra los diez grados en el cuadrante de Acaz. (II Reyes 20, 11)

  • En su tiempo, el Faraón Necó, rey de Egipto, fue en ayuda del rey de Asiria hacia el río Éufrates. El rey Josías le salió al paso, pero el faraón le dio muerte al primer encuentro en Meguido. (II Reyes 23, 29)

  • A la muerte de Hodad, en Edón hubo jefes: Timná, Alvá, Yetet, (I Crónicas 1, 51)

  • Después de la muerte de Jesrón, Caleb se casó con Éfrata, que había sido esposa de Jesrón, su padre, de la que tuvo a Asjur, padre de Técoa. (I Crónicas 2, 24)

  • David se dijo: "Yo trataré con benevolencia a Janún, como su padre me trató a mí". David le envió una embajada de pésame por la muerte de su padre. Pero cuando los siervos de David llegaron a la tierra de los amonitas, (I Crónicas 19, 2)

  • Ante ti somos extranjeros y emigrantes, como lo fueron todos nuestros padres. Nuestros días sobre la tierra pasan como sombra en la cual no hay esperanza. (I Crónicas 29, 15)

  • Todo el que no buscara al Señor, Dios de Israel, sin distinguir entre grandes o pequeños, hombres o mujeres, sería condenado a muerte. (II Crónicas 15, 13)

  • Hizo lo que es malo a los ojos del Señor, lo mismo que la casa de Ajab, que fue su consejera después de la muerte de su padre para perdición suya. (II Crónicas 22, 4)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre todo o bem que ela ainda pode fazer”. São Padre Pio de Pietrelcina