17. Ahora piensa bien lo que debes hacer, porque es cosa decidida la ruina de nuestro patrón y de toda su casa. En cuanto a él, ¡no es más que un miserable, al que ni siquiera se le puede hablar!".





“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina