Talált 351 Eredmények: Cae

  • Al saber David que Nabal había muerto, exclamó: «¡Bendito sea Yavé, que me ha hecho justicia por la injuria que yo recibí de Nabal! Me ha impedido hacer el mal y ha hecho recaer la maldad de Nabal sobre su cabeza.»David envió mensajeros para proponer matrimonio a Abigaíl. (1 Samuel 25, 39)

  • David se dijo a sí mismo: «Uno de estos días voy a caer en manos de Saúl. Lo mejor es que me refugie en tierra de los filisteos, para que Saúl deje de buscarme por todo el país de Israel. Así no podrá agarrarme. Huiré entonces de sus dominios.» (1 Samuel 27, 1)

  • Entonces David consultó a Yavé: «¿Debo atacar a los filisteos? ¿Caerán en mis manos?» Y Yavé respondió: «Ataca, te aseguro que pondré a los filisteos en tus manos.» (2 Samuel 5, 19)

  • David consultó a Yavé, que le respondió: «No los ataques de frente, sino que rodéalos por detrás y déjate caer por el lado de las balsameras. (2 Samuel 5, 23)

  • Ella replicó: «Que el rey se digne jurar por el nombre de Yavé, su Dios, para que el vengador de la sangre no aumente mi desgracia dando muerte a mi hijo.» Entonces él dijo: «Vive Yavé, que no caerá en tierra un solo cabello de tu hijo.» (2 Samuel 14, 11)

  • Yavé hace recaer sobre tu cabeza toda la sangre de la familia de Saúl, que masacraste. Así como tú le quitaste el trono a Saúl, así también Yavé se lo ha dado a tu hijo Absalón. Tú eres un criminal, por eso te persigue la desgracia.» (2 Samuel 16, 8)

  • Me dejaré caer cuando esté cansado y sin fuerzas; lo tomaré por sorpresa y toda la gente que está con él huirá. Así mataré al rey solo (2 Samuel 17, 2)

  • Seguro que ahora está escondido en alguna caverna u otro lugar. Si al principio caen algunos de los nuestros, se dirá que han sido derrotadas las tropas de Absalón. (2 Samuel 17, 9)

  • Atacaremos a David dondequiera que se encuentre; caeremos sobre él como el rocío sobre la tierra, y no dejaremos con vida ni a él, ni a ninguno de los hombres que lo acompañan. (2 Samuel 17, 12)

  • Llegaron y sitiaron Abel-Bet-Maaká, donde estaba Sebá. Levantaron un terraplén frente a la muralla de la ciudad y todo el ejército que seguía a Joab cavaba debajo de la muralla para hacerla caer. (2 Samuel 20, 15)

  • Los derribo y ya no pueden levantarse, caen, y quedan bajo mis pies. (2 Samuel 22, 39)

  • David dijo al profeta Gad: «Estoy en un gran apuro, pero prefiero caer en las manos de Dios, cuya misericordia es grande, y no caer en manos de los hombres.» (2 Samuel 24, 14)


“Os talentos de que fala o Evangelho são os cinco sentidos, a inteligência e a vontade. Quem tem mais talentos, tem maior dever de usá-los para o bem dos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina