Talált 351 Eredmények: Cae

  • Tú te dices: "He derrotado a Edom." Por esto te sientes muy glorioso, pero quédate ahora en tu casa. ¿Por qué exponerte a una calamidad y a caer tú y Judá contigo?» (2 Crónicas 25, 19)

  • de los hijos de Sefatías, Zebadías, hijo de Micael, y con él ochenta hombres; (Esdras 8, 7)

  • Dividiste el mar ante nuestros padres, que pasaron por medio de él sin mojarse los pies. Hundiste en sus profundidades a sus perseguidores, como piedra que cae en las profundas aguas. (Nehemías 9, 11)

  • No sabía que arriba de la pared había gorriones, los cuales dejaron caer sus excrementos que, calientes, cayeron sobre mis ojos, causándome manchas blancas. Fui a los médicos para que me sanaran, pero mientras más remedios me ponían, menos veía, hasta que quedé ciego. Estuve cuatro años sin ver. Mis hermanos estaban afligidos; Ajikar se preocupó de mi alimentación durante dos años, hasta que se trasladó a Elimaida. (Tobías 2, 10)

  • Untale los ojos con la hiel del pez; él los frotará y caerán como escamas de sus ojos. Recobrará la vista y verá la luz.» (Tobías 11, 8)

  • Hombres, mujeres y niños, desfallecidos por el hambre, caerán en las plazas antes de que intervengas con la espada. (Judit 7, 14)

  • Porque si de hecho se apoderan de nosotros, caerá toda Judea, y nuestro Santuario será saqueado. (Judit 8, 21)

  • Mira su orgullo y deja caer tu ira sobre sus cabezas, y da a mi mano de mujer la fuerza necesaria para lo que he dispuesto. (Judit 9, 9)

  • Pero, para que no quedes decepcionado y fracasado, la muerte caerá sobre ellos. Han caído en un pecado que hace enojarse a Dios cada vez que lo cometen (Judit 11, 11)

  • «No debo comer esto para no caer en falta; basta con lo que traje.» Holofernes replicó: (Judit 12, 2)

  • Los que estaban en torno a los judíos, también huyeron; entonces los guerreros de Israel se dejaron caer sobre ellos. (Judit 15, 3)

  • «Si el rey lo cree conveniente, si todavía cuento con su simpatía, si mi petición le parece justa y si aún está enamorado de mí, le ruego que escriba para que se anulen las disposiciones que envió por cartas Amán, que atentaban contra la vida de los judíos de todas las provincias de tu imperio. Pues ¿cómo podría quedarme tranquila viendo la desgracia que va a caer sobre mi pueblo? (Ester 8, 5)


“Reze pelos infiéis, pelos fervorosos, pelo Papa e por todas as necessidades espirituais e temporais da Santa Igreja, nossa terna mãe. E faça uma oração especial por todos os que trabalham para a salvação das almas e para a glória do nosso Pai celeste.” São Padre Pio de Pietrelcina