Talált 669 Eredmények: Manos

  • y también: Ellos te llevarán en sus manos, para que tu pie no tropiece en ninguna piedra.» (Evangelio según San Lucas 4, 11)

  • Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diversos males se los llevaban a Jesús y él los sanaba imponiéndoles las manos a cada uno. (Evangelio según San Lucas 4, 40)

  • Un sábado, Jesús atravesaba unos sembrados, y sus discípulos cortaban espigas, las desgranaban en las manos y se comían el grano. (Evangelio según San Lucas 6, 1)

  • «Escuchen y recuerden lo que ahora les digo: El Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los hombres.» (Evangelio según San Lucas 9, 44)

  • Mi Padre ha puesto todas las cosas en mis manos; nadie sabe quién es el Hijo, sino el Padre; nadie sabe quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera dárselo a conocer.» (Evangelio según San Lucas 10, 22)

  • Jesús empezó a decir: «Bajaba un hombre por el camino de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos bandidos, que lo despojaron hasta de sus ropas, lo golpearon y se marcharon dejándolo medio muerto. (Evangelio según San Lucas 10, 30)

  • Jesús entonces le preguntó: «Según tu parecer, ¿cuál de estos tres fue el prójimo del hombre que cayó en manos de los salteadores?» (Evangelio según San Lucas 10, 36)

  • El fariseo entonces se extrañó al ver que Jesús no se había lavado las manos antes de ponerse a comer. (Evangelio según San Lucas 11, 38)

  • Y le impuso las manos. Al instante se enderezó y se puso a alabar a Dios. (Evangelio según San Lucas 13, 13)

  • En el momento oportuno envió a un servidor a los inquilinos para que le entregaran su parte del fruto de la viña. Pero los inquilinos lo golpearon y lo hicieron volver con las manos vacías. (Evangelio según San Lucas 20, 10)

  • Volvió a mandar a otro servidor, que también lo golpearon, lo insultaron y lo echaron con las manos vacías. (Evangelio según San Lucas 20, 11)

  • y Jesús gritó muy fuerte: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu». Y dichas estas palabras, expiró. (Evangelio según San Lucas 23, 46)


Jesus lhe quer bem, da maneira que só Ele sabe amar.” São Padre Pio de Pietrelcina