Talált 80 Eredmények: Montañas

  • Esto dice Yavé: ¡ El enemigo se burló de ustedes: "¡Oh sí, las montañas eternas pasaron a ser de nuestra propiedad!" (Ezequiel 36, 2)

  • Pues bien, montañas de Israel, escuchen la palabra de Yavé. Esto dice a las montañas y a las colinas, a los barrancos y a los valles, a las ruinas devastadas y a las ciudades abandonadas que se transformaron en presa y entretención para lo que quedaba de sus vecinos: (Ezequiel 36, 4)

  • Por eso, profetiza respecto de la tierra de Israel. Esta palabra de Yavé transmitirás a las montañas y a las colinas, a los barrancos y a los valles: Esto fue lo que decidí en mi indignación y cólera. Ya que fueron humillados por las naciones, (Ezequiel 36, 6)

  • Pero ustedes, montañas de Israel, producirán cosechas y frutos para mi pueblo de Israel que está próximo a volver. (Ezequiel 36, 8)

  • Haré de ellos una sola nación en mi país en las montañas de Israel; un único rey reinará sobre todos ellos, ya no serán más dos naciones, ni estarán más separados en dos reinos. (Ezequiel 37, 22)

  • Después de siglos vas a recibir órdenes, después de muchos años te vas a poner en camino al país cuyos habitantes escaparon a la espada; fueron reunidos de numerosos pueblos en las montañas de Israel, las que estuvieron mucho tiempo abandonadas. Después que se separaron de los demás pueblos, viven todos en paz. (Ezequiel 38, 8)

  • Ante mí temblarán los peces del mar, las aves del cielo, los animales del campo, todos los reptiles que se arrastran por el suelo y todos los hombres que están en la tierra. Las montañas se hundirán, los acantilados se derrumbarán y todas las fortificaciones caerán". (Ezequiel 38, 20)

  • Te traeré, te conduciré, te haré venir de las extremidades del norte y haré que subas a las montañas de Israel. (Ezequiel 39, 2)

  • Te dejarás caer sobre las montañas de Israel con todo tu ejército y todos los pueblos que vienen contigo. Ya te he destinado como comida de las aves de rapiña, de toda clase de pájaros y de las fieras salvajes. (Ezequiel 39, 4)

  • Hijo de hombre, dile a toda clase de aves y a las fieras salvajes: "Júntense, vengan de todas partes y reúnanse para el sacrificio -palabra de Yavé- un gran sacrificio que he preparado en las montañas de Israel; habrá carne para comer y sangre para beber. (Ezequiel 39, 17)

  • Los santuarios altos de Aven, donde pecaba Israel, serán destruidos; zarzas y cardos cubrirán sus altares. Entonces dirán a las montañas: «Escóndannos», y a los cerros: «Caigan sobre nosotros». (Oseas 10, 8)

  • Llamen a los que viven en los palacios asirios o en los palacios egipcios y díganles: Júntense en las montañas de Samaria, para que vean los desórdenes que hay en esa ciudad o los crímenes que en ella se cometen. (Amós 3, 9)


“É preciso amar, amar e nada mais”. São Padre Pio de Pietrelcina