Talált 113 Eredmények: Vieron

  • Cuando los amonitas vieron que los arameos habían huído, retrocedieron ante Abisaí y se encerraron en la ciudad. Enton ces Joab puso fin a la campaña contra los amo nitas y volvió a Jerusalén. (2 Samuel 10, 14)

  • Todo Israel supo de la sentencia que Salomón había pronunciado y lo respetaron, pues vieron que había en él una sabiduría divina para hacer justicia. (1 Reyes 3, 28)

  • Unos hombres que pasaban vieron el cadáver tendido junto al camino y al león, que estaba junto a él. Llegando a la ciudad en que vivía el anciano profeta, contaron lo que habían visto. (1 Reyes 13, 25)

  • Por eso, en cuanto los jefes de los carros vieron a Josafat, pensaron que era el rey de Israel, y lo rodearon para atacarlo, pero Josafat lanzó su grito de guerra y, (1 Reyes 22, 32)

  • Del otro lado lo vieron los hermanos profetas de Jericó y dijeron: «El espíritu de Elías reposa sobre Eliseo.» Le salieron al encuentro, se arrodillaron ante él (2 Reyes 2, 15)

  • Cuando se despertaron por la mañana y vieron brillar el sol sobre las aguas, éstas les parecieron desde lejos como si fueran sangre. (2 Reyes 3, 22)

  • Cuando entraron a Samaria, Eliseo dijo: «Yavé, abre sus ojos para que vean.» Abrió Yavé sus ojos y vieron que estaban dentro de Samaria. (2 Reyes 6, 20)

  • Todos los hombres de Israel, que estaban en el valle, vieron que las tropas de Israel se daban a la fuga y que Saúl y sus hijos habían muerto. Entonces abandonaron sus ciudades y huyeron; vinieron los filisteos y se establecieron en ellas. (1 Crónicas 10, 7)

  • Cuando los hijos de Ammón vieron que se habían hecho odiosos a David, Janún y los amonitas enviaron mil talentos de plata para tomar a sueldo carros de guerra y hombres para manejarlos, de Aram de Mesopotamia, Aram de Maacá y de Sobá. (1 Crónicas 19, 6)

  • Cuando los hombres de Hadadezer vieron que Israel los derrotó, hicieron la paz con David y le quedaron sometidos. En adelante los arameos ya no se atrevieron a seguir ayudando a los amonitas. (1 Crónicas 19, 19)

  • Dio al rey ciento veinte talentos de oro, gran cantidad de aromas y piedras preciosas. Nunca se vieron aromas como los que la reina de Saba dio al rey Salomón. (2 Crónicas 9, 9)

  • Cuando los hombres de Judá se dieron cuenta, vieron que se presentaba el combate de frente y por detrás. (2 Crónicas 13, 14)


“Quanto mais se caminha na vida espiritual, mais se sente a paz que se apossa de nós.” São Padre Pio de Pietrelcina