Talált 110 Eredmények: Desgracia
Yo formo la luz y creo las tinieblas; doy la dicha y produzco la desgracia; soy yo, el Señor, quien hace todo esto. (Isaías 45, 7)
Ninguno acusa con justicia, nadie litiga con honradez; se confía en la nada, se habla falsedad, maldad se concibe y se engendra desgracia. (Isaías 59, 4)
así yo también me recrearé en su desgracia y haré recaer sobre ellos lo que temen; porque he llamado y nadie ha respondido, he hablado y no han escuchado. Han hecho lo que es malo a mis ojos, han elegido lo que a mí no me agrada. (Isaías 66, 4)
El Señor me dijo: "Desde el norte se derramará la desgracia sobre todos los habitantes de la tierra. (Jeremías 1, 14)
Israel era la posesión santa del Señor, las primicias de su cosecha; todo el que comía de ella lo pagaba, la desgracia caía sobre él, dice el Señor. (Jeremías 2, 3)
que dicen al leño: "Tú eres mi padre", y a la piedra: "Tú me has engendrado". Ellos me dan la espalda y no la cara, mas cuando llega la desgracia gritan: "¡Levántate, sálvanos!". (Jeremías 2, 27)
Izad una señal hacia la parte de Sión. ¡Huid, no os detengáis! Pues la desgracia voy a traer del norte, una inmensa catástrofe. (Jeremías 4, 6)
Una voz desde Dan lanza la alarma, desde los montes de Efraín se anuncia la desgracia. (Jeremías 4, 15)
¡Huid, hijos de Benjamín, lejos de Jerusalén! ¡Tocad la trompeta en Técoa! ¡Sobre Betqueren izad una señal! Pues por el norte asoma la desgracia, un inmenso desastre. (Jeremías 6, 1)
Escucha, tierra. He aquí que yo traigo la desgracia sobre este pueblo; es el fruto de sus rebeliones, porque no han atendido a mis palabras y han desechado mi ley. (Jeremías 6, 19)
Y tú no intercedas en favor de este pueblo, no eleves por ellos ni súplicas ni oraciones: porque no les escucharé cuando acudan en el tiempo de su desgracia". (Jeremías 11, 14)
¿Qué viene a hacer mi amada en mi casa, tras haber cometido tantas iniquidades? ¿Crees que los votos y las carnes sagradas alejarán de ti la desgracia y podrás escapar? (Jeremías 11, 15)