Talált 126 Eredmények: Nación

  • Otras veces decido, sobre una nación o un reino, edificarlo y plantarlo; (Jeremías 18, 9)

  • pero si esa nación comete el mal que yo repruebo en lugar de escuchar mi voz, entonces yo también me arrepiento del bien que había decidido hacerle". (Jeremías 18, 10)

  • Al cabo de estos setenta años yo castigaré al rey de Babilonia y a aquella nación -dice el Señor- por sus crímenes, así como al país de los caldeos, y haré de él una desolación eterna. (Jeremías 25, 12)

  • Pero antes la nación y el reino que no se someta a Nabucodonosor, rey de Babilonia, y no ofrezca su cuello al yugo del rey de Babilonia, serán castigados por mí con espada, hambre y peste -dice el Señor-, hasta que los ponga en sus manos. (Jeremías 27, 8)

  • Pero a la nación que doble el cuello bajo el yugo del rey de Babilonia y se someta a él, yo la dejaré en paz en su tierra -dice el Señor-, la cultivará y vivirá en ella". (Jeremías 27, 11)

  • ¿Por qué tú y tu pueblo queréis exponeros a morir a espada, de hambre y de peste, como ha anunciado el Señor a la nación que se niegue a someterse al rey de Babilonia? (Jeremías 27, 13)

  • Procurad el bien de la nación adonde yo os he deportado y rogad por ella al Señor, porque su prosperidad será también la vuestra. (Jeremías 29, 7)

  • Si dejaran de valer a quellas leyes ante mí -dice el Señor-, entonces la casa de Israel dejará también de ser una nación ante mí para siempre. (Jeremías 31, 36)

  • ¿No te has fijado en lo que dicen estas gentes: "Las dos familias que el Señor había escogido han sido desechadas"? Así desprecian a mi pueblo, que para ellos ya no es una nación. (Jeremías 33, 24)

  • Traeré sobre Elán los cuatro vientos de los cuatro puntos cardinales. A todos estos vientos los dispersaré, y no habrá nación adonde no lleguen fugitivos de Elán. (Jeremías 49, 36)

  • Viene un pueblo del norte, una gran nación; reyes numerosos se levantan desde los confines de la tierra. (Jeremías 50, 41)

  • No cedas tu gloria a otro, ni tu dignidad a nación extranjera. (Baruc 4, 3)


“Somente por meio de Jesus podemos esperar a salvação.” São Padre Pio de Pietrelcina