Fondare 823 Risultati per: Judá y Tamar

  • En aquel tiempo, Josué hizo una campaña contra los anaquitas y los exterminó de la Montaña: de Hebrón, de Debir, de Anab, en una palabra, de toda la montaña de Judá y de toda la montaña de Israel. Los consagró al exterminio con todas sus ciudades, (Josué 11, 21)

  • Los hijos de Judá fueron a Guilgal, donde estaba Josué; y Caleb, hijo de Iefuné, el quenizita, le dijo: "Tú sabes muy bien lo que el Señor dijo a Moisés, el hombre de Dios, acerca de mí y de ti, en Cades Barné. (Josué 14, 6)

  • El territorio que tocó en suerte a la tribu de los hijos de Judá, limitaba en su extremo meridional, hacia el sur, con Edóm y el desierto de Cin. (Josué 15, 1)

  • Finalmente, el límite occidental estaba formado por el Mar Grande y su playa. Estos eran los límites que bordeaban el territorio asignado a los clanes de los hijos de Judá. (Josué 15, 12)

  • A Caleb, hijo de Iefuné, se le asignó una parte en medio de los hijos de Judá, como el Señor se lo había ordenado a Josué. Esa parte era Quiriat Arbá -Arbá era el padre de Anac y Quiriat Arbá es Hebrón-. (Josué 15, 13)

  • Esta fue la herencia de los clanes de la tribu de Judá. (Josué 15, 20)

  • Las ciudades fronterizas pertenecientes a la tribu de los hijos de Judá, hacia la frontera de Edóm, en el Négueb, eran las siguientes: Cabseel, Eder, Iagur, (Josué 15, 21)

  • Pero los hijos de Judá no pudieron desposeer a los jebuseos, que ocupaban Jerusalén. Por eso los jebuseos viven todavía hoy en Jerusalén, junto a los hijos de Judá. (Josué 15, 63)

  • Dividirán el territorio en siete partes. Judá se quedará en su territorio, al sur, y la casa de José en el suyo, al norte. (Josué 18, 5)

  • Se extrajo la suerte correspondiente a los clanes de la tribu de Benjamín, y a ellos les tocó el territorio comprendido entre el de los hijos de Judá y el de los hijos de José. (Josué 18, 11)

  • Luego el límite daba vuelta, girando por el lado oeste, hacia el sur, y saliendo de la montaña que se encuentra frente a Bet Jorón, al sur, iba a terminar en Quiriat Baal -o sea, en Quiriat Iearím- ciudad que pertenece a los hijos de Judá. Este era el límite occidental. (Josué 18, 14)

  • La segunda suerte le tocó a Simeón, o sea, a la tribu de los hijos de Simeón con sus clanes. La herencia que se les asignó estaba en medio del territorio de los hijos de Judá. (Josué 19, 1)


O maldito “eu” o mantém apegado à Terra e o impede de voar para Jesus. São Padre Pio de Pietrelcina