Fondare 194 Risultati per: Seán
Que los hombres justos sean tus comensales y que tu orgullo esté en el temor del Señor. (Eclesiástico 9, 16)
Por muchos que sean, no te alegres de ellos, si les falta el temor del Señor. (Eclesiástico 16, 2)
Vengan, y discutamos -dice el Señor-: Aunque sus pecados sean como la escarlata, se volverán blancos como la nieve; aunque sean rojos como la púrpura, serán como la lana. (Isaías 1, 18)
Y ahora, habitantes de Jerusalén y hombres de Judá, sean ustedes los jueces entre mi viña y yo. (Isaías 5, 3)
Ante la amenaza de uno solo, temblarán mil; ante la amenaza de cinco, ustedes huirán, hasta que sean dejados como un mástil en la cumbre de una montaña, como señal sobre una colina. (Isaías 30, 17)
digan a los que están desalentados: "¡Sean fuertes, no teman: ahí está su Dios! Llega la venganza, la represalia de Dios: él mismo viene a salvarlos". (Isaías 35, 4)
Yo confirmo la palabra de mis servidores y cumplo el designio de mis mensajeros. Yo digo de Jerusalén: "¡Que sea habitada!", y de las ciudades de Judá: "¡Que sean reconstruidas!", y yo restauraré sus ruinas. (Isaías 44, 26)
Yo haré que mis palabras sean un fuego en tu boca, y ese pueblo será la leña que el fuego devorará. (Jeremías 5, 14)
Porque así habla el Señor: Esta vez lanzaré como una honda a todos los habitantes del país; estrecharé el cerco sobre ellos, para que sean alcanzados. (Jeremías 10, 18)
¡Escuchen y presten atención, no sean altaneros, porque ha hablado el Señor! (Jeremías 13, 15)
¡Emigren de en medio de Babel, salgan del país de los caldeos! Sean como los machos cabríos a la cabeza del rebaño. (Jeremías 50, 8)
Que caigan víctimas de la espada en el país de los caldeos, y sean traspasados en sus calles. (Jeremías 51, 4)