Fondare 1169 Risultati per: Templo de Jerusalén

  • La mujer se dirigió a todo el pueblo con tanta cordura, que ellos le cortaron la cabeza a Seba, hijo de Bicrí, y se la arrojaron a Joab. Este hizo sonar la trompeta y levantaron el asedio, yéndose cada uno a su carpa. Joab, por su parte, se volvió a Jerusalén, junto al rey. (II Samuel 20, 22)

  • Pero en mi angustia invoqué al Señor, grité a mi Dios pidiendo auxilio, y él escuchó mi voz desde su Templo, mi grito llegó hasta sus oídos. (II Samuel 22, 7)

  • Así recorrieron todo el país y, al cabo de nueve meses y veinte días, llegaron a Jerusalén. (II Samuel 24, 8)

  • El Ángel extendió la mano hacia Jerusalén para exterminarla, pero el Señor se arrepintió del mal que le infligía y dijo al Ángel que exterminaba al pueblo: "¡Basta ya! ¡Retira tu mano!". El Ángel del Señor estaba junto a la era de Arauná, el jebuseo. (II Samuel 24, 16)

  • Cuarenta años duró su reinado sobre Israel: reinó siete años en Hebrón y treinta y tres en Jerusalén. (I Reyes 2, 11)

  • El rey mandó llamar a Semei y le dijo: "Constrúyete una casa en Jerusalén y quédate allí, sin salir a ninguna parte. (I Reyes 2, 36)

  • Semei dijo al rey: "Muy bien. Tu servidor obrará conforme a lo que ha dicho mi señor el rey". Y Semei permaneció largo tiempo en Jerusalén. (I Reyes 2, 38)

  • Cuando le avisaron a Salomón que Semei había ido de Jerusalén a Gat y que estaba de vuelta, (I Reyes 2, 41)

  • Salomón se emparentó con el Faraón, rey de Egipto: tomó por esposa a la hija del Faraón y la llevó a la Ciudad de David, hasta que terminó de construir su propia casa, la Casa del Señor y el muro en torno de Jerusalén. (I Reyes 3, 1)

  • Salomón se despertó, y comprendió que había tenido un sueño. Luego regresó a Jerusalén y se presentó ante el Arca de la Alianza del Señor; ofreció holocaustos y sacrificios de comunión, e hizo un banquete para todos sus servidores. (I Reyes 3, 15)

  • El vestíbulo, frente a la nave central del Templo, medía diez metros de largo, cubriendo todo el ancho de la Casa, y cinco metros de ancho, sobre el frente de la Casa. (I Reyes 6, 3)

  • Los capiteles que estaban encima de las columnas, en el vestíbulo del Templo, tenían una moldura en forma de azucena y medían dos metros. (I Reyes 7, 19)


“Vive-se de fé, não de sonhos.” São Padre Pio de Pietrelcina