Fondare 152 Risultati per: incienso

  • Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos. (II Reyes 14, 4)

  • Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos. (II Reyes 15, 4)

  • Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos. Jotám fue el que edificó la puerta alta de la Casa del Señor. (II Reyes 15, 35)

  • Ofreció sacrificios y quemó incienso en los lugares altos, sobre las colinas y bajo todo árbol frondoso. (II Reyes 16, 4)

  • allí, en los lugares altos, quemaron incienso como las naciones que el Señor había desterrado delante de ellos; cometieron malas acciones para provocar al Señor (II Reyes 17, 11)

  • Hizo desaparecer los lugares altos, rompió las piedras conmemorativas, taló el poste sagrado e hizo pedazos la serpiente de bronce que había hecho Moisés, porque hasta esos días los israelitas le quemaban incienso; se la llamaba Nejustán. (II Reyes 18, 4)

  • Porque me han abandonado y han quemado incienso a otros dioses, provocando mi indignación con toda la obra de sus manos, mi furor se ha encendido contra este lugar, y no se extinguirá. (II Reyes 22, 17)

  • Suprimió a los sacerdotes que habían establecido los reyes de Judá para quemar incienso en los lugares altos, en las ciudades de Judá y en los alrededores de Jerusalén, y a los que quemaban incienso a Baal, al sol, a la luna, a los signos del zodíaco y a todo el Ejército de los cielos. (II Reyes 23, 5)

  • Hizo venir de las ciudades de Judá a todos los sacerdotes, y profanó los lugares altos donde esos sacerdotes quemaban incienso, desde Gueba hasta Berseba. Derribó el lugar alto dedicado a los sátiros, que estaba a la entrada de la puerta de Josué, el gobernador de la ciudad, a la izquierda de quien entra por la puerta de la ciudad. (II Reyes 23, 8)

  • Otros tenían a su cuidado los utensilios, todos los vasos sagrados, la harina de las ofrendas, el vino, el aceite, el incienso y los aromas. (I Crónicas 9, 29)

  • Los hijos de Amram fueron Aarón y Moisés. Aarón fue separado, junto con sus hijos, para consagrar perpetuamente las cosas santísimas, para quemar incienso delante del Señor, y para servirlo y bendecir en su Nombre eternamente. (I Crónicas 23, 13)

  • y el peso del oro refinado para el altar del incienso; finalmente, entregó el modelo de la carroza y de los querubines que cubren con sus alas extendidas el Arca de la Alianza del Señor. (I Crónicas 28, 18)


“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina