5. Entonces Resín, rey de Arám, y Pécaj, hijo de Remalías, rey de Israel, subieron a combatir contra Jerusalén. Asediaron a Ajaz, pero no pudieron entrar en combate.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina