21. Yo vi entre el botín un hermoso manto de Senaar, doscientos siclos de plata y un lingote de oro que pesa cincuenta siclos; me gustaron y los guardé. Ahora están escondidos en la tierra, en medio de mi carpa, y la plata está debajo".





“Desapegue-se daquilo que não é de Deus e não leva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina