Daniel, 4
10. Yo contemplaba en mi cama las visiones de mi mente. De pronto bajó del celo un vigilante, un santo,
10. Yo contemplaba en mi cama las visiones de mi mente. De pronto bajó del celo un vigilante, un santo,
“Enquanto estivermos vivos sempre seremos tentados. A vida é uma contínua luta. Se às vezes há uma trégua é para respirarmos um pouco.” São Padre Pio de Pietrelcina