Löydetty 120 Tulokset: Quieres

  • ¿Y ahora quieres que muera este pueblo como un solo hombre? Pero entonces las naciones que oyeron hablar de ti van a decir: (Números 14, 15)

  • ¿Te parece poco habernos sacado de una tiera que manaba leche y miel para hacernos morir en este desierto? ¿Y tú quieres hacer de jefe? (Números 16, 13)

  • «Si quieres hacernos ese favor, que se nos dé esta tierra en propiedad, no nos hagas pasar el Jordán.» (Números 32, 5)

  • Busca la justicia si quieres vivir y conservar la tierra que te da Yavé, tu Dios. (Deuteronomio 16, 20)

  • En cuanto llegó ella, aconsejó a su marido que solicitara a su padre un campo. Axa se apeó de su burro y Caleb le preguntó: «¿Qué quieres?» (Josué 15, 18)

  • En cuanto llegó Axá, sugirió a Otoniel que pidiese a su padre un campo. Ella se bajó de su burro y Caleb le preguntó: «¿Qué quieres?» (Jueces 1, 14)

  • «Permítenos retenerte y prepararte un cabrito.» Porque Manoaj no sabía que era el Angel de Yavé. Pero él dijo a Manoaj: «Aunque me obligues a quedarme, no probaré tu comida. Pero si quieres sacrificar alguna víctima por el fuego, ofrécesela a Yavé.» (Jueces 13, 16)

  • La mujer de Sansón se puso a llorar echándose encima de él y le dijo: «No me quieres, ni me amas, has propuesto una adivinanza a los jóvenes de mi pueblo, y a mí no me la has explicado.» El le respondió: «No se la he explicado a mis padres ¿y te la explicaré a ti?» (Jueces 14, 16)

  • Yo he creído conveniente avisarte de esto para que tú la compres en presencia de todos estos testigos. Si tú quieres cumplir con tu obligación de rescatarla, hazlo; si no, dímelo, porque después de ti me toca a mí cumplirlo.» El otro contestó: «Muy bien, la voy a rescatar.» (Rut 4, 4)

  • Arriesgó su vida para matar al filisteo, con lo cual Yavé dio una gran victoria a todo Israel. Tú lo viste y te alegraste. Entonces, ¿por qué quieres pecar contra sangre inocente matando a David sin motivo?» (1 Samuel 19, 5)

  • Me dijo: Déjame ir, por favor, porque se celebra un sacrificio de familia en nuestra ciudad y mi hermano me ha invitado. Si quieres, pues, hacerme un favor, permíteme dar una vuelta por allí para ver a mis hermanos. Por eso no ha venido a la mesa del rey.» (1 Samuel 20, 29)

  • hoy has demostrado que realmente me quieres, pues Yavé me puso en tus manos y tú no me has quitado la vida. (1 Samuel 24, 18)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina