Löydetty 120 Tulokset: Quieres

• Querías que esta a la que quieres más que a las demás, fuese la patria de los hijos de Dios dignos de ella. (Sabiduría 12, 7)

• No quieres que los hombres, obras de tu Sabiduría, estén sin hacer nada; pero, mira cómo confían su vida a un pedazo de madera: una balsa les permite atravesar las olas sanos y salvos. (Sabiduría 14, 5)

• Si tú quieres, hijo mío, llegarás a ser instruido; si te aplicas, se abrirá tu espíritu. (Sirácides (Eclesiástico) 6, 32)

• Si quieres escuchar, aprenderás; si pones atención, serás sabio. (Sirácides (Eclesiástico) 6, 33)

• Si tú quieres, puedes observar los mandamientos; está en tus manos el ser fiel. (Sirácides (Eclesiástico) 15, 15)

• ¿Quieres mimar a tu hijo? un día te hará temblar; juguetea con él, te causará tristeza. (Sirácides (Eclesiástico) 30, 9)

• No te rías con él si no quieres un día afligirte con él y tener al fin que rechinar los dientes. (Sirácides (Eclesiástico) 30, 10)

• Pero debe ser todo lo contrario con lo que sigue, si no quieres pecar. No tengas vergüenza: (Sirácides (Eclesiástico) 42, 1)

• Si tú quieres volver, oh Israel, dice Yavé, si quieres convertirte a mí, si alejas de mi vista tus sucios ídolos, ya no tendrás más que esconderte de mí. (Jeremías 4, 1)

• Hazme caso, Jerusalén, si no quieres que me aleje de ti y te conviertas en un desierto, en una tierra deshabitada. (Jeremías 6, 8)

• Entonces Yavé me dijo: «Si vuelves a mí, yo te haré volver a mi servicio. Separa el oro de la escoria si quieres ser mi propia boca. Tendrán que volver a ti, pero tú no volverás a ellos. (Jeremías 15, 19)

• ¿Acaso quieres morir tú y tu pueblo por la espada, el hambre y la peste, como Yavé lo ha amenazado a la nación que no quiera obedecer al rey de Babilonia? (Jeremías 27, 13)