Löydetty 134 Tulokset: batalla final

  • Los amonitas salieron a campaña y se ordenaron en batalla a la entrada de la ciudad, mientras que los reyes que habían venido estaban aparte en el campo. (1 Crónicas 19, 9)

  • Puso el resto del ejécito al mando de su hermano Abisay y lo ordenó en batalla frente a los amonitas. (1 Crónicas 19, 11)

  • Avisaron a David, que reuniendo a todo Israel pasó el Jordán, llegó donde estaban ellos y tomó posición frente a ellos. David se puso en orden de batalla contra los arameos, y éstos trabaron combate con él. (1 Crónicas 19, 17)

  • Después de esto, tuvo lugar una batalla en Guezer contra los filisteos; entonces Sibekay, jusasita, mató a Sipay, uno de los descendientes de Rafá. Los filisteos tuvieron que someterse. (1 Crónicas 20, 4)

  • Salió Asá contra él y se pusieron en orden de batalla en el valle al norte de Maresá. (2 Crónicas 14, 9)

  • Ajab, rey de Israel, dijo a Josafat, rey de Judá: «¿Quieres marchar conmigo contra Ramot de Galaad?» Le contestó: «Somos uno solo yo y tú. Tanto mi pueblo como el tuyo estaremos contigo en la batalla.» (2 Crónicas 18, 3)

  • Sucedió que uno de los soldados arameos disparó su arco sin saber a quién apuntaba, hiriendo al rey de Israel, por entre las hombreras y la coraza. El rey dijo al que guiaba su carro: «Date vuelta y sácame de la batalla, porque me siento malherido.» (2 Crónicas 18, 33)

  • que se retiró a Jizrael para curarse de las heridas que había recibido en Ramá, en la batalla contra Jazael, rey de Aram. Ocozías, hijo de Joram, rey de Judá, bajó a Jizrael para visitar a Joram, hijo de Ajab, que se encontraba enfermo; (2 Crónicas 22, 6)

  • Pero Josías no se apartó de él, pues estaba decidido a darle batalla, y no escuchó las palabras de Nekó, que venían de boca de Dios. Y avanzó para librar batalla en la llanura de Meguidó. (2 Crónicas 35, 22)

  • Contó unos ciento veinte mil hombres escogidos para la guerra, y doce mil arqueros a caballo, a los que formó en orden de batalla. (Judit 2, 15)

  • Hijos de madres jóvenes los atacaron; como a hijos de desertores los hirieron. Murieron en la batalla contra mi Señor. (Judit 16, 12)

  • ¿Quién es ese Rey de la gloria? El Señor, el fuerte, el poderoso, el Señor, valiente en la batalla. (Salmos 24, 8)


“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina