Löydetty 134 Tulokset: batalla final

  • su corazón está firme, nada teme, al final, despreciará a sus adversarios. (Salmos 112, 8)

  • Señor, enséñame el camino de tus preceptos, que los quiero seguir hasta el final. (Salmos 119, 33)

  • Bendito sea el Señor, Roca mía, que mis manos adiestra para el combate y mis dedos para la batalla, (Salmos 144, 1)

  • de tal modo que olvidaran la Ley y cambiaran todas sus costumbres. Al final, el decreto decía: (1 Macabeos 1, 49)

  • luego salieron de su campamento a presentarles batalla. (1 Macabeos 4, 13)

  • él les dijo: «No piensen ahora en el botín, pues otra batalla nos espera. (1 Macabeos 4, 17)

  • Este se levantó de madrugada e hizo avanzar su ejército muy envalentonado por el camino de Bet Zacarías. Las tropas se dispusieron para entrar en batalla y se tocaron las trompetas. (1 Macabeos 6, 33)

  • Habían vencido a Antíoco el Grande, rey de Asia, que les presentó batalla con ciento veinte elefantes, con caballería, carros y un ejército muy poderoso. Fue derrotado y, después de caer en sus manos, (1 Macabeos 8, 6)

  • Judas vio la dispersión de su ejército y se le quebrantó el ánimo. La batalla era inminente y no tenía tiempo para volverlos a juntar. (1 Macabeos 9, 7)

  • La tierra temblaba con el estruendo de los ejércitos, y comenzó la batalla, que iba a durar todo el día. (1 Macabeos 9, 13)

  • Los enemigos, al saber que Jonatán velaba con su tropa, dispuesto a dar batalla, tuvieron miedo y se desanimaron; encendieron fuegos en su campamento y huyeron. (1 Macabeos 12, 28)

  • escuadrones de caballería en orden de batalla, ataques y cargas de una y otra parte, movimientos de escudos, muchas lanzas, flechas, lanzazos, resplandor de armaduras y corazas de toda clase. (2 Macabeos 5, 3)


“Se você tem dúvidas sobre a fé é exatamente porque tem fé!” São Padre Pio de Pietrelcina