Talált 246 Eredmények: fuerza

  • Yo, al contrario, estoy lleno del espíritu de Yavé. El me da celo por la justicia, me llena de fuerza y de ánimo para denunciar a Jacob su pecado, para descubrir las faltas de Israel. (Miqueas 3, 8)

  • Etiopía y Egipto la defendían; su fuerza no tenía límite; Put y los libios venían en su ayuda. (Nahún 3, 9)

  • Por eso la Ley está sin fuerza y no se hace justicia. Como los malvados mandan a los buenos, no se ve más que derecho torcido. (Habacuc 1, 4)

  • ¡Y así pasa y se va como el viento...! ¡Su fuerza es su dios! (Habacuc 1, 11)

  • Yavé, que es mi Señor, es mi fuerza el da a mis pies la agilidad de un ciervo y me hace caminar por las alturas. (Habacuc 3, 19)

  • Esta es una palabra de Yavé para Zorobabel: «Ni con el valor ni con la fuerza, sino sólo con mi espíritu. (Zacarías 4, 7)

  • Entonces los jefes de Judá dirán en su interior: «La fuerza de Jerusalén le viene de Yavé, su Dios.» (Zacarías 12, 5)

  • Pilato insistió: «¿Qué ha hecho de malo?» Pero ellos gritaban cada vez con más fuerza: «¡Que sea crucificado!» (Evangelio según San Mateo 27, 23)

  • A eso de las tres, Jesús gritó con fuerza: Elí, Elí, lamá sabactani, que quiere decir: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?» (Evangelio según San Mateo 27, 46)

  • Varias personas trataban de hacerlo callar. Pero él gritaba con más fuerza: «¡Hijo de David, ten compasión de mí!» (Evangelio según San Marcos 10, 48)

  • Pilato les preguntó: «Pero ¿qué mal ha hecho?» Y gritaron con más fuerza: «¡Crucifícalo!» (Evangelio según San Marcos 15, 14)

  • A medida que el niño iba creciendo, le vino la fuerza del Espíritu. Vivió en lugares apartados hasta el día en que se manifestó a Israel. (Evangelio según San Lucas 1, 80)


“Deus quer que as suas misérias sejam o trono da Sua misericórdia.” São Padre Pio de Pietrelcina