Talált 168 Eredmények: Vestidos

  • Sus vestidos se volvieron de una blancura resplandeciente, como ningún batanero de la tierra podría blanquearlos. (Marcos 9, 3)

  • Y en sus enseñanzas decía: "Guardaos de los maestros de la ley, a los que les gusta pasearse con vestidos ostentosos, ser saludados en las plazas, (Marcos 12, 38)

  • Lo crucificaron y se repartieron a suertes sus vestidos, a ver qué se llevaría cada uno. (Marcos 15, 24)

  • Mientras él oraba, cambió el aspecto de su rostro y sus vestidos se volvieron de una blancura resplandeciente. (Lucas 9, 29)

  • "Guardaos de los maestros de la ley, a los que les gusta llevar vestidos ostentosos, ser saludados en las plazas, ocupar los primeros puestos en las sinagogas (Lucas 20, 46)

  • Jesús decía: "Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen". Y se repartieron sus vestidos a suertes. (Lucas 23, 34)

  • Mientras ellas estaban desconcertadas por esto, se presentaron dos varones con vestidos deslumbrantes. (Lucas 24, 4)

  • Por eso se dijeron: "No debemos partirla; echémosla a suertes a ver a quién le toca". Para que se cumpliera la Escritura: Se repartieron mis vestidos y echaron a suertes mi túnica. Es cabalmente lo que hicieron los soldados. (Juan 19, 24)

  • Ellos se quedaron mirando fijamente al cielo mientras él se iba, cuando se les aparecieron dos hombres vestidos de blanco, (Hechos 1, 10)

  • lo llevaron fuera de la ciudad y se pusieron a apedrearlo. Los testigos habían dejado sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo. (Hechos 7, 58)

  • Cuando se enteraron de ello los apóstoles Bernabé y Pablo, rasgaron sus vestidos y se lanzaron entre la gente gritando: (Hechos 14, 14)

  • De nadie he deseado plata, oro o vestidos. (Hechos 20, 33)


“Aquele que procura a vaidade das roupas não conseguirá jamais se revestir com a vida de Jesus Cristo.” São Padre Pio de Pietrelcina