Talált 94 Eredmények: huesos secos

  • esto será medicina para tu carne y refrigerio para tus huesos. (Proverbios 3, 8)

  • Una mujer virtuosa es la corona de su marido, una mujer desvergonzada es como la carcoma en sus huesos. (Proverbios 12, 4)

  • Un corazón tranquilo es la vida del cuerpo, la envidia es la caries de los huesos. (Proverbios 14, 30)

  • Corazón alegre, excelente remedio; un espíritu abatido seca los huesos. (Proverbios 17, 22)

  • Con la paciencia se consigue persuadir al juez, y la lengua dulce rompe los huesos. (Proverbios 25, 15)

  • Como tú no sabes por qué camino entra el espíritu en los huesos en el seno de una mujer encinta, así no conoces la obra de Dios, que hace todas las cosas. (Eclesiastés 11, 5)

  • La gracia de la mujer alegra a su marido, y su saber le vigoriza los huesos. (Eclesiástico 26, 13)

  • El latigazo produce cardenales, pero el golpe de la lengua quebranta los huesos. (Eclesiástico 28, 17)

  • Que sus huesos reflorezcan en sus tumbas; que sus nombres, renovados en sus hijos, sean honrados como conviene a aquellos ilustres varones. (Eclesiástico 46, 12)

  • En cuanto a los doce profetas, que sus huesos florezcan en su tumba, porque confortaron a Jacob y lo liberaron con fidelidad de la esperanza. (Eclesiástico 49, 10)

  • Ni hubo hombre semejante a José, jefe de sus hermanos, apoyo del pueblo, cuyos huesos fueron tratados con respeto. (Eclesiástico 49, 15)

  • Cuando los ramos están secos, se les rompe; vienen las mujeres y los queman. Por ser un pueblo sin inteligencia no se compadece de él su creador, no le da su favor el que le ha formado. (Isaías 27, 11)


“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina