Fondare 209 Risultati per: Preguntó

  • un hombre lo encontró dando vueltas por el campo y le preguntó: "¿Qué estás buscando?". (Génesis 37, 15)

  • Él le preguntó: "¿Qué debo dejarte?". "Tu sello con su cordón y el bastón que llevas en la mano", le respondió. Él se los entregó y se acostó con ella, dejándola embarazada. (Génesis 38, 18)

  • Entonces preguntó a la gente del lugar: "¿Dónde está esa prostituta que se sentaba en Enaim, al borde del camino?". Ellos le respondieron: "Allí nunca hubo una prostituta". (Génesis 38, 21)

  • "¿Por qué están hoy con la cara triste?", preguntó a los funcionarios del Faraón que estaban arrestados con él en la casa de su señor. (Génesis 40, 7)

  • Cuando Jacob se enteró de que en Egipto vendían cereales, preguntó a sus hijos: "¿Por qué se quedan ahí, mirándose unos a otros?". (Génesis 42, 1)

  • Al verlos, él los reconoció en seguida, pero los trató como si fueran extraños y les habló duramente. "¿De dónde vienen?", les preguntó. Ellos respondieron: "Venimos de Canaán para abastecernos de víveres". (Génesis 42, 7)

  • Al levantar los ojos, José vio a Benjamín, el hijo de su misma madre, y preguntó: "¿Es este el hermano menor de que me habían hablado?". Y añadió: "Que Dios te favorezca, hijo mío". (Génesis 43, 29)

  • y entonces José les preguntó: "¿Qué manera de proceder es esta? ¿Acaso ustedes ignoraban que un hombre como yo sabe recurrir a la adivinación?". (Génesis 44, 15)

  • Este les preguntó: "Y ustedes, ¿de qué se ocupan?". "Somos pastores, como también lo fueron nuestros antepasados", respondieron ellos. (Génesis 47, 3)

  • y este le preguntó: "¿Cuántos años tienes?". (Génesis 47, 8)

  • Al ver a los hijos de José, Israel preguntó: "Y estos, ¿quiénes son?". (Génesis 48, 8)

  • El rey las mandó llamar y les preguntó: "¿Por qué han obrado así y han dejado con vida a los varones?". (Exodo 1, 18)


“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina