Salmos, 112
1. ¡Aleluya! Feliz el hombre que teme al Señor y se complace en sus mandamientos.
1. ¡Aleluya! Feliz el hombre que teme al Señor y se complace en sus mandamientos.
“Lembre-se de que os santos foram sempre criticados pelas pessoas deste mundo, e puseram sob seus pés o mundo e as suas máximas .” São Padre Pio de Pietrelcina