Talált 124 Eredmények: Decían

  • Cuando los ángeles los dejaron y se fueron al cielo, los pastores se decían unos a otros: "Vamos a Belén y veamos ese acontecimiento que el Señor nos ha anunciado". (Lucas 2, 15)

  • Todos los que lo oían se admiraban de lo que decían los pastores. (Lucas 2, 18)

  • Su padre y su madre estaban admirados de las cosas que decían de él. (Lucas 2, 33)

  • Todos daban su aprobación y, admirados de las palabras tan hermosas que salían de su boca, decían: "¿No es éste el hijo de José?". (Lucas 4, 22)

  • Todos quedaron sobrecogidos, y glorificaron a Dios. Llenos de temor, decían: "Hoy hemos visto cosas maravillosas". (Lucas 5, 26)

  • Entonces les dijo: "¿Dónde está vuestra fe?". Llenos de miedo y de admiración, se decían: "¿Quién es éste, que manda incluso a los vientos y al agua y le obedecen?". (Lucas 8, 25)

  • El virrey Herodes se enteró de todas estas cosas y estaba desconcertado, porque unos decían que Juan había resucitado de entre los muertos, (Lucas 9, 7)

  • Al ver esto, todos murmuraban y decían: "Se ha hospedado en casa de un pecador". (Lucas 19, 7)

  • Como algunos decían que el templo era muy bello por sus piedras tan hermosas y por los exvotos, dijo: (Lucas 21, 5)

  • Y le decían muchas otras injurias. (Lucas 22, 65)

  • Eran María Magdalena, Juana y María la de Santiago y las demás que estaban con ellas las que decían estas cosas a los apóstoles. (Lucas 24, 10)

  • que decían: "Verdaderamente el Señor ha resucitado y se ha aparecido a Simón". (Lucas 24, 34)


“O bem dura eternamente.” São Padre Pio de Pietrelcina